Nuestro plato estrella "LA PAELLA".
Hoy, como último plato, preparamos "paella" ayudados por nuestros profes David, María (inglés) y Phoung (auxiliar de conversación en inglés).
Días antes hemos ido preparando los ingredientes:
- rice (arroz)
- chicken (pollo)
- beans (judias)
- lemon (limón)
Primero conseguimos el pollo y la verdura "Can I have a piece of chicken, please?, Can I have beans, please? y tras cocinarlos, añadimos el arroz (rice) y un trocito de limón (lemon).
Días antes hemos ido preparando los ingredientes:
- rice (arroz)
- chicken (pollo)
- beans (judias)
- lemon (limón)
Primero conseguimos el pollo y la verdura "Can I have a piece of chicken, please?, Can I have beans, please? y tras cocinarlos, añadimos el arroz (rice) y un trocito de limón (lemon).
"It´s my favourite food!!!"
11:15
4 años
,
Gastronomía
,
inglés
,
Motivación
,
tradició
0
0 comentarios :
Publicar un comentario
Antes de comentar, queremos contarte un pequeña fábula de Sócrates:
Al margen de que esta historia sea cierta o no, puede hacerte reflexionar sobre las cosas que dices cada día.
Cuentan que un día un conocido se encontró con el filósofo y le dijo:
—Sócrates, ¿sabes lo que acabo de oír acerca de un amigo tuyo?
—Espera un momento —replicó Sócrates—. Antes de continuar me gustaría que pasaras un pequeño test a lo que vas a decir. Lo llamo el triple filtro.
—¿El triple filtro?
—Eso es. Antes de que digas nada sobre mi amigo puede ser una buena idea tomar un momento y filtrar lo que me vas a decir. El primer filtro es el de la verdad. ¿Estás completamente seguro de que lo que me vas a decir es verdad?
—No —respondió el otro—. Solamente acabo de escucharlo…
—Está bien —dijo Sócrates—. Entonces no sabes si es cierto o no. Ahora el segundo filtro, el de la bondad. ¿Es acaso bueno lo que vas a decir sobre mi amigo?
—No, más bien todo lo contrario.
—Así que lo que me vas a decir es malo, y realmente no sabes si es cierto. Bien, todavía queda el filtro de la utilidad. Lo que me vas a contar sobre mi amigo, ¿es útil para mí?
—No, probablemente no.
—Bien —continuó Sócrates—. Desconoces la veracidad de lo que me quieres decir. Además es malo e inútil. ¿Entonces para qué quieres contármelo?
Gracias por tu tiempo y tu comentario veraz, sincero y constructivo.